¿Porque el juego sensorial es importante para el desarrollo de tu bebé?
Desde el nacimiento hasta la primera infancia, los bebés usan sus sentidos para explorar y tratar de comprender el mundo que los rodea. Lo hacen tocando, saboreando, oliendo, viendo, moviéndose y escuchando.
Los niños e incluso los adultos aprenden mejor y retienen más información cuando utilizan sus sentidos. Muchos de nuestros recuerdos favoritos están asociados con uno o más de nuestros sentidos: por ejemplo, el olor de una fogata en una noche de verano o una canción cuya letra memorizaste con un amigo de la infancia. Ahora, cuando sus fosas nasales y tímpanos se estimulan con estos olores y sonidos familiares, respectivamente, su cerebro activa un recuerdo de esos momentos especiales.
Brindar oportunidades para que los niños usen activamente sus sentidos mientras exploran su mundo a través del “juego sensorial” es fundamental para el desarrollo del cerebro: ayuda a construir conexiones nerviosas en las vías de este.
Esto conduce a la capacidad del niño para completar tareas de aprendizaje más complejas y apoya el crecimiento cognitivo, el desarrollo del lenguaje, las habilidades motoras finas, la interacción social y las habilidades para resolver problemas.
Los juguetes sensoriales para bebes son una opción ideal para estimular los sentidos de tu hijo. Estos los hacen especialmente con diferentes texturas, colores, formas, sonidos, e incluso olores. En www.mahatmaplay.com puedes conseguir una gran variedad de estos juguetes, y lo mejor, que te indican a partir de que edad están recomendados.
Gusto: La estimulación que viene cuando nuestros receptores del gusto reaccionan a los químicos en nuestra boca.
Tacto: la estimulación que proviene de los receptores táctiles de nuestra piel que reaccionan a la presión, calor/frío o vibraciones.
Olor: la estimulación de los receptores químicos en las vías respiratorias superiores (nariz).
Visión: la estimulación de los receptores de luz en nuestros ojos, que nuestro cerebro interpreta en imágenes visuales.
Audición: la recepción del sonido, a través de la mecánica en nuestro oído interno.
Sin embargo, hay dos más que a menudo se nos pasan por alto:
Conciencia corporal (también conocida como propiocepción): la retroalimentación que recibe nuestro cerebro de los receptores de estiramiento en los músculos y los receptores de presión en las articulaciones que nos permite tener una idea de dónde están nuestros cuerpos en el espacio.
Equilibrio: la estimulación del sistema vestibular del oído interno para indicarnos la posición de nuestro cuerpo en relación con la gravedad.
➜ Entonces, ¿qué es el juego sensorial?
El juego sensorial incluye cualquier actividad que estimule los sentidos del bebé: tacto, olfato, gusto, movimiento, equilibrio, vista y oído.
Las actividades sensoriales facilitan la exploración y animan de forma natural a los niños a utilizar los procesos científicos mientras juegan, crean, investigan y exploran. Las actividades sensoriales permiten a los niños perfeccionar sus límites para la información sensorial diferente, lo que ayuda al cerebro a establecer conexiones más fuertes para procesar y responder a la información sensorial.
Por ejemplo, al principio un niño puede tener dificultades para jugar correctamente con un compañero cuando hay otras cosas que suceden en el entorno con ruidos conflictivos. Sin embargo, a través del juego sensorial que explora sonidos y tareas, el niño aprende a adaptarse para poder bloquear ruidos sin importancia y enfocarse en el juego que está teniendo con sus compañeros.
Otro ejemplo es un niño que es particularmente quisquilloso con el consumo de alimentos con una textura húmeda como los espaguetis, el uso del juego sensorial puede ayudar al niño a tocar, oler y jugar con la textura en un ambiente con bajas expectativas.
A medida que tu hijo desarrolla confianza y comprensión de esta textura, ayuda a construir vías positivas en el cerebro para decirles que es seguro interactuar con este alimento. El juego sensorial literalmente ayuda a dar forma a lo que los niños creen que es positivo y seguro en el cerebro. En última instancia, da forma a las elecciones que hacen los niños y que influyen en su comportamiento.
Aquí hay 5 razones por las que el juego sensorial es beneficioso:
1. Las investigaciones muestran que el juego sensorial crea conexiones nerviosas en las vías del cerebro, lo que conduce a la capacidad del niño para completar tareas de aprendizaje más complejas.
2. El juego sensorial apoya el desarrollo del lenguaje, el crecimiento cognitivo, las habilidades motoras finas y gruesas, las habilidades para resolver problemas y la interacción social.
3. Este tipo de juego ayuda a desarrollar y mejorar la memoria.
4. El juego sensorial es ideal para calmar a un niño ansioso o frustrado.
5. Esto ayuda a los niños a aprender atributos sensoriales (caliente, frío, pegajoso, seco)
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